22 junio 2018

Comentarios. "Bomarzo". Mujica Lainez

Bomarzo: Manuel Mujica Lainez

Autor:  Rafael Serrano Allely

Mis notas.

Aunque la personalidad del protagonista se va modelando a lo largo de todo el relato, destaco una primera parte en la que se va marcando su psicología, describiendose con gran maestria la evolución de sus sentimientos, a partir de un hecho fundamental: su exclusión familiar y social debido a las deformidades de su cuerpo y cuya consecuencia resume al final del libro cuando dice: “me odiaron y odié”, toma conciencia de que se había convertido en un monstruo.

En medio está la soledad, el resentimiento, la venganza, la vanidad, la arrogancia... pero tambien el deseo de ser amado y aceptado. La obsesión por sus defectos y por la fealdad en general y su pasión por la belleza, las letras, las colecciones, las fiestas...

Hay un elemento muy dinámicos como es el que se desprende del horoscopo de Sandro Benedetto que parecía otorgarle una vida ilimitada, la inmortalidad (aunque en ocasiones más que la inmortalidad, le seducía ser como los demás hombres)

Está escrito desde una perspectiva actual, con frecuentes aclaraciones explícitas al lector de lo que en aquella época podría ser frecuente o no. Esta perspectiva le permite referirse a hechos que ocurrieron despues de su muerte.

Creció en una atmósfera en la que el crimen era algo tan natural como las hazañas bélicas y los casamientos provechosos. Lo que contribuyó a modelar su su psicología y a curtirlo”

El duque murió..., murió de veneno , sin ninguna originalidad, como cualquier principe del Renacimiento”

Me parece muy conseguida la recreación del ambiente aunque encuentro excesivas las referencias a personajes y acontecimientos de la época.

Como síntesis me quedo con lo siguiente:

¿No habría amado, en realidad, a nadie, fuera de mí mismo? Mi amor por Bomarzo, ¿sería el amor del aire que me circundaba, y lo amaría por el mero hecho de que estaba impregnado de mí? Yo, que me odié tanto, que rehuía mi imagen en el espejo al cual asomaba la mueca del Demonio (que podía ser el Demonio y podía ser un demonio), que despreciaba mi joroba, mis piernas, mi caricatura, ¿habría sido el solo objeto de mi amor egoista y, Narciso horrorizado, habré mendigado en los otros, en hombres y mujeres, lo que me rehusaba mi espejo, buscándome siempre a mí mismo, al Pier Francisco perfecto que adoré?”

Novela muy interesante y recomendable.

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